domingo, 22 de octubre de 2017

El licor de Pitinga

También conocida por su nombre científico como Eugenia uniflora

La pitinga, o Eugenia uniflora, es un arbusto, de muchas pero delgadas ramas. No pierde nunca las hojas, salvo que se encuentre en zonas de mucho calor. Y tiene floras blancas, casi siempre solitarias, que dan unos frutos en forma de baya, entre rojizos y naranjados.

Entre los distintos usos de la pintaga, como se conoce a este árbol enano en Argentina, está el de la producción de un apreciado licor local que lleva su mismo nombre. Por su puesto su fruto también se puede comer tal cual, o en zumo, en mermelada, y casi cualquier otra elaboración que se pueda dar a una fruta.

En El Hombre del Rey aparece el licor de pintinga, cuando Esteban se entrevista con el alcalde de Tandil, que cuando se acomodan en su casa para mantener una charla, el regidor le ofrece una copa de esta bebida.


Nota: Imagen extraída de la web Wikipedia


jueves, 12 de octubre de 2017

El territorio de Neuquén

En el camino de regreso de Esteban de Zubiaga y Norzagaray

Neuquén inicialmente fue un territorio fronterizo de entre el Imperio Español y la Nación Araucana, tras el Tratado del Biobio, en la actual Argentina. Durante 2 siglos fue un territorio para el comercio, expediciones científicas, evangelización cristiana y algunas escaramuzas militares. Las hostilidades contra los indígenas se acentuaron en los últimos años del siglo XVIII, cuando los criollos locales ya comenzaban a atreverse a desafiar las leyes de la Corona.

Está situado al sur de la provincia de Mendoza, al este de Río Negro, y limitando al oeste con Chile por la cordillera de los Andes. Con una superficie de 94.000 kilómetros cuadrados, escasamente poblado, con una orografía caracterizada por las impresionantes montañas de la cordillera, la llanura pampeana y abundantes ríos que atraviesan su territorio. Entre ellos el río Neuquén del que toma su nombre.

En El Nombre del Rey Neuquén hace su aparición cuando Esteban de Zubiaga y Norzagaray deja a los araucanos, y se marcha hacia el norte, a Mendoza, pues ha recibido indicaciones para resolver el asunto que le ha llevado hasta allí, y debe llegar hasta esa otra provincia, para lo que, partiendo desde algún lugar en la actual Chubut, debe atravesar ese territorio. Además, también vuelve a aparecer cuando el coronel Kreiber recibe órdenes de ir hasta un fuerte en ese territorio para una reunión del alto mando.


Nota: Imagen extraída de la web kudoybook


martes, 10 de octubre de 2017

Las Paces de Quilín o Tratado del Biobio

Las Paces de Quilín o Tratado del Biobio
Se trata de un tratado de paz entre los indios araucanos y el gobernador de Chile en 1641, después de casi un siglo de guerras entre indígenas y españoles. Su texto fue incluido, como el resto de tratados con otras naciones indias en otras tierras de América, en los textos del Derecho de Indias, por el que se regulaban las relaciones con los aborígenes americanos.

En lugar de exponer en que consistían estas paces, vamos a verlo en boca de uno de los personajes de El Hombre del Rey, en una reunión con Esteban:

Le voy a contar una historia –siguió diciendo Caupolongo-, a mi me la contó mi padre, a él su padre, a aquel el suyo, y así durante generaciones -dijo con tono solemne-. Hace ya tiempo, más de dos siglos, mi pueblo y el suyo –en referencia al gobierno de España en el virreinato de La Plata- llegaron a un pacto, se llamó Parlamento de Quilín por el río junto al que se realizó. Allí se pactó que el río Biobío sería la frontera de guerra, que iba del gran mar del Este al gran mar del Oeste. Consecuencia de que ni sus tropas podían con la feroz resistencia de mi pueblo, ni nosotros conseguiríamos nunca una victoria que les derrotara. Con aquella paz nuestro pueblo continuaba siendo libre pero se hermanó con el suyo. El rey pondría puestos militares en las costas para defender el territorio de sus enemigos de Europa, pero se adentraría más allá –iba diciendo ensimismado en sus palabras bajo la escucha atenta del resto de jefes, de su sobrina y Esteban-. Nuestro pueblo creció y se expandió por estas tierras, los frailes trajeron la palabra de su Dios para quien quiso escucharla, y el comercio floreció con la capital.”


...o como rezaba el texto, más o menos, literal:

  • Que los mapuche conservarían su absoluta libertad, sin que nadie pudiera molestarlos en su territorio ni esclavizarlos o entregarlos a encomenderos
  • Que su territorio tenía como frontera norte el Biobío
  • Que los españoles destruirían el fuerte de Angol, que quedaba dentro del territorio mapuche
  • Que los mapuche debían liberar a los cautivos españoles que retenían
  • Que dejarían entrar a sus tierras a los misioneros que fueran en son de paz a predicarles el cristianismo
  • Que se comprometían a considerar como enemigos a los enemigos de España y que no se aliarían con extranjeros que llegaran a la costa



Nota: Imagen extraída de la web Memoria Alterna


domingo, 8 de octubre de 2017

Asalto al cuartel de la Guardia Civil de Güeñes

La III Guerra Carlista comenzó el 23 de abril de 1872, cuando 800 hombres armados, a los mandados por Cuevillas, atacaron el cuartel de la Guardia Civil de Güeñes, donde se encontraban 23 guardias que se vieron obligados a rendirse, siendo hechos prisioneros.

En este asalto participo activamente Esteban de Zubiaga y Norzagaray, protagonista de El Hombre del Rey, siendo esta su primera acción militar, además en su localidad natal. Hasta ese momento ningún Zubiaga se había significado políticamente, pues dada su actividad económica preferían permanecer al margen, para poder abastecer a unos y otros, según el cariz que tomaran los acontecimientos. Con lo que esta actuación se consideró en la comarca como un hecho que le incurría sólo a Estaban, y no a los Zubiaga y Norzagaray.


Nota: Imagen extraída de la web http://www.cascoscoleccion.com/espana/esgchist.htm


sábado, 7 de octubre de 2017

La boina roja carlista

Uno de los elementos más característicos de la indumentaria de las tropas carlistas es su boina colorada. Aunque en un principio las emplearon de color blanco, este último quedó reservado, prácticamente, para las unidades formadas por mujeres.

El origen de que los soldados carlistas llevan una boina roja, está en la precariedad de su equipamiento. Al comienzo de la I Guerra Carlista, buena parte del ejercito partidario de Carlos María Isidro de Borbón, estaba formado por voluntarios que alistaban aportando su propio indumentaria, cada uno de guardarropa particular, con lo que no exista la uniformada que se podría esperar de un ejercito. Por lo que para reconocerse en el campo de batalla optaron por llevar todo una boina roja, que sirviera para identificarse en el fragor de la batalla como miembro del ejercito carlista.

En El Hombre del Rey el protagonista Esteban, no emplea vestimenta militar, pero conforme se van desarrollando los acontecimientos, decide que tiene que hacer uso de su uniforme, que había incluido en su equipaje, y con el de boina colorada con la que en determinado momento hace acto de presencia.


Nota: Imagen extraída de la web http://www.requetes.com/uniformes.html